Una vez estuve allí me puse mi sombrero para causar una gran impresión ante la familia de Sinco pero no fue así, toda la muchedumbre mosqueada comenzó a insultarme e incluso alguien me arrojaba objetos, me cayeron hostias de todas partes; La madre de Sinco se me acerco y la comente:
-¿Por que me agreden?
-Por que pareces gilipollas con el puto sombrero. Mientras seguían cayéndome todo tipo de objetos al mismo tiempo que escuchaba todo tipo de obscenidades vejatorias hacia mi persona.
-Quítatelo ya coño. Dijo la madre de Sinco.
Entonces fue cuando me lo quite y toda la muchedumbre mosqueada al ver mi cara gritaban juntos:
-Vete ya de aquí soplapollas.
Estos insultos solo se vieron concluidos una vez el párroco comenzó la ceremonia;
Después de un largo discurso del párroco este me dijo:
-Sube hijo que tu has sido lo mas grande que ha tenido el difunto, no te avergüences ábrenos tu corazón.
Entonces me dispuse a subir cuando comenzaron de nuevo los insultos y el párroco dijo:
-Halla paz hermanos, halla paz.
Estas palabras hicieron que la familia se callara, subí al altar y comencé mi discurso:
-Espero que estas palabras lleguen al corazón de todos y sepan perdonarme, yo se cual fue la causa de la muerte de Sinco, murió como un héroe si, no lo niego, pero fue por culpa de otra persona y esa persona soy yo, para salvarme la vida (a lo que comenzaron de nuevo los insultos y una patata se estampo con mi frente causándome un gran picor) pero no murió en vano. Me ayudo a llegar donde estoy y yo les protegeré a todos ustedes excepto al hijo de puta que me lanzo la patata que me lo voy a cargar en cuanto salga de aquí.
Entonces fue cuando todos se me echaron encima y no pude concluir con mi discurso, teniendo que abandonar el lugar con la madre de Sinco y sin mirar atrás, ni si quiera cuando mas patatas caían sobre mi cabeza.
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