Dia 10-2 "Cita con el del tatuaje"

El muy cabrón seguía apuntándonos y estaba muy convencido de que la habíamos cagado, pero lo que no sabía es que el Tiripa se le iba a acercando por detrás, en cuestión de segundos el Tiri le rodeó con el brazo sobre el cuello, y Nicolaidis se sacudió un poco disparando su pistola sobre la pierna de nuestro compañero, ya nos acercamos todos y conseguimos reducirle. La tortura iba a comenzar, dije a Jimmy que llevara al Tiripa al hospital. Se largaron y el Palotas y yo nos quedamos con ese hijo de puta, la había cagado, le metimos dentro del club y fuimos al cobertizo que blanco usaba para las torturas, le atamos y el Palotas le dijo:

-¿Qué pasa cabrón?, ¿Ya no eres tan valiente?.

-Dejadme en paz yo no haber echo nada a vosotros.-Contexto el tío mierda.

-¿Por qué mataste a el Kako?-Pregunté

-Eran ordenes de Blanco, lo hice para que Blanco dejar en paz a mi y pagar mi salario.

-Pero que coño dices payaso- Dijo el Palotas a la par que cogía un lápiz y comenzaba a sacarle punta.

El tío comenzó a gritar voces de auxilio, por lo que tuvimos que amordazarle la boca. El Palotas se le acercó y fue introduciendo poco a poco el lápiz por su oído, hasta que comenzó a salir bastante sangre y el rumano no paraba de moverse y de berrear, ya al sacar el lápiz , junto a el venia algo clavado que parecía ser el tímpano de ese tío, joder eso debería de doler que te cagas. Le quitamos la cinta de la boca para ver si podíamos sacarle algo de información pero el tío no paraba de gritar mientras lloraba, por lo que volvimos a sellársela. El Palotas dijo: -He tenido una idea- Joder las ideas del Palotas, ese tío lo iba a pasar fatal. Comenzó el Palotas a bajarle los pantalones y los calzoncillos mientras recogía una grapadora de la mesa.

Al bajarle por completo los calzones pudimos apreciar algo muy asqueroso el hijo puta se estaba cagando a la par que orinaba y el Palotas dijo: - Joder que ascazo- y comenzó a graparle los testículos a la madera de la silla como si se trataran de adornos colgados en una clase de primaria.

Ya decidí acabar con el sufrimiento de ese bastardo, cogí una motosierra que Blanco tenía colgada en la pared y la puse en marcha, el tío se puso a sudar como un cerdo y seguía defecando y orinando, se la comencé a acercar al pecho, al principio costaba un poco introducírsela pero poco a poco se iba amoldando a sus costillas, la sangre saltaba hacia un lado y hacia otro en forma de borbotones, una vez llegue al estomago pude descubrir que ese tío había comido lentejas con chorizo, era algo repugnante pero yo y Palotas disfrutábamos viendo sufrir a ese bastardo, el Palotas se acercó al tío por la espalda y cogiendo una lija comenzó a frotarle el cuello hasta borrarle el tatuaje y dijo:-Ya no es el del tatuaje- mientras nos descojonábamos . Dejamos el cuerpo destrozado, escribimos una nota para Blanco (fijo que no le iba a hacer mucha gracia) y salimos de allí cagando ostias.